- Visitar Cadaqués
- Pasear por Calella de Palafrugell
Si hablamos de imprescindibles de la zona no podemos olvidar Calella de Palafrugell. En sus orígenes, Calella también era un pueblecito de pescadores y todavía se respira esta esencia. Además, si te gustan las canciones marineras y la música de tasca, tienes que conocer la Cantada de Habaneras que se hace cada verano. Hace más de medio siglo que celebra y es una de las más importantes del estado español en este género musical.
- Visitar les ruinas de Ampurias
Las ruinas de Ampurias son el yacimiento arqueológico grecorromano más importante de Cataluña. Esta ciudad fue fundada en 575 a. C. a causa de su situación estratégica como ruta comercial y se convirtió en un gran centro económico y comercial además de la colonia griega más grande de toda la Península Ibérica. Merece la pena perderse para poder entender toda la historia que se esconde detrás.
- Ver las «Illes Medes» (o hacer submarinismo)
Declaradas como Parque Natural Nacional Protegido, estas 7 islas están situadas ante la Playa del Estartit. Para visitarlas, puedes hacerlo mirándolas de lejos desde cualquier punto del Estartit, practicando submarinismo… U otra opción es coger un barco preparado para ver el fondo marino que podrás coger desde el Puerto del Estartit. Sea como fuere, no te lo puedes perder!
- Bañarse en las playas de la Costa Brava
Y por último, no puedes marchar de la Costa Brava sin bañarte en una de sus playas o calas salvajes. Si te gusta la aventura, te recomendamos que cojas alguno de los caminos de ronda (caminos que vorean el mar) que las une entre sí y así puedas ir descubriendo aquellas que están más escondidas.